Domingo de la Ascensión del Señor

Domingo de la Ascensión del Señor.

Ciertamente cada quien puede vivir sus propias experiencias de Dios, y cada cual hablara de ellas de manera singular, pero ninguna de estas experiencias puede quedar inundada de individualismo, entonces perdería todo su sentido y ya no sería experiencia de Dios sino un cuento egoísta, fanático y farandulero.

Jesús, en su misión no quiso estar sólo y llamo a muchos a ser sus discípulos, y es en torno a ellos que manifesta que él es quien ha bajado del cielo.

La misión de Jesús se realiza en comunidad y una vez más, reúne a sus discípulos para revestirlos de la fuerza de lo alto, inundar de Dios, para entonces salir a anunciar el evangelio a todos los pueblos; es allí donde comienza la vida de la Iglesia.

Jesús asciende, no porque se le ha ocurrido la grandiosa idea de abandonar a sus discípulos, nada que ver, él asciende porque la misión ahora estará en manos de sus discípulos con la ayuda del Espíritu Santo. Somos tu y yo los que ahora debemos dar continuidad al evangelio y juntos ascender a la morada de Dios.

P. Deiby Sánchez

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